sábado, 26 de marzo de 2011

¿PIADOSOS Y AMIGOS DEL DINERO?


Cuando Jesús dijo: "No pueden servir a Dios y al dinero" (Lc. 16,13), porque son como dos señores: si el corazón y la vida está ocupado por uno, no tiene cabida el otro, no hay sitio para él, los fariseos se rieron de él.
"Ningún sirviente puede estar al servicio de dos señores; porque aborrecerá a uno y querrá al otro, o bien se apegará a uno y despreciará al otro. No puede servir a Dios y al dinero. Oyeron todo esto los fariseos que son amigos del dinero, y se burlaban de él" (Lc. 16,13-24).
La alternativa está clara. No hay componendas. El que tiene al Dios que Jesús en su corazón y en su vida, no puede hacer de las riquezas el ídolo o meta de su vida.
Los fariseos eran gente ante todo piadosa, religiosamente cumplidora. Vivían de su trabajo. hasta repartían limosnas entre los más necesitados de su pueblo. pero consideraban la riqueza como signo de la bendición de Dios. Por eso les sonaba como disparate y hasta blasfemia todo eso de que Jesús predicaba de compartir su vida y sus riquezas con los pobres.
Ellos y todos los "amigos del dinero" se burlaban de Jesús que dice que nadie tiene derecho de gozarse de sus bienes mientras haya pobres a su lado.
Los fariseos son "intachables ante la gente", observantes, justos, y se glorían de ello. Jesús les dice:
"Ustedes son los que de la dan de intachables ante la gente, pero Dios los conoce por dentro, y ese encumbrarse entre los hombres le repugna a Dios" (Lc. 16,15).
Peores son todavía aquellos a quienes Jesús acusa de que.
"se comen los bienes de las viudas con pretexto de largos rezos"(Mc. 12,40).